Dame vida con tu Palabra

¿Cuándo fue la primera vez que me encontré con tu Palabra, Señor?
Hoy te quiero dar gracias por tu Palabra de vida, porque ella me levanta del lecho de muerte de mis vicios y pecados, y me invita a restituirte todos los bienes que me has dado, materiales y espirituales, porque de ti procede todo lo Bueno. 

He sentido la tentación de echarme para atrás, y muchas veces lo he hecho, pero hoy quiero, como la viuda, depositar mi pequeña ofrenda, que aunque no es mucho, es todo lo que tengo: te ofrezco mi vida, mis proyectos, mis sueños, mi familia y mi futuro. De mi pasado te entrego lo bueno y lo malo, resucitame a tu vida plena, dame a comer tu cuerpo, es decir: compartir contigo tu Pascua gloriosa... Señor mío y Dios mío, amén.
Que el Señor te conceda su paz, así sea.
Fray Maseo

Comentarios