«La autoridad nace del buen ejemplo» se dice y esto se verifica aún desde antiguo, cuando se elegía solo a personas prudentes como jueces y a los guerreros más ejemplares como comandantes. La autoridad está al servicio de quienes a ella se acogen.
Hoy es un buen día para examinar el ejercicio de mi autoridad -sobre otros, sobre mi propia vida y conciencia- y ver si en ella realmente hay suavidad y misericordia o por el contrario hay un deseo malsano de oprimir con cargas innecesarias o demasiado pesadas.
Jesús, Señor paciente y buen Maestro, enséñanos a ejercer la autoridad con el buen ejemplo, con firmeza y suavidad. Enséñanos a llevar las riendas de nuestra vida con autocompasión y misericordia.
Hoy es un buen día para examinar el ejercicio de mi autoridad -sobre otros, sobre mi propia vida y conciencia- y ver si en ella realmente hay suavidad y misericordia o por el contrario hay un deseo malsano de oprimir con cargas innecesarias o demasiado pesadas.
Jesús, Señor paciente y buen Maestro, enséñanos a ejercer la autoridad con el buen ejemplo, con firmeza y suavidad. Enséñanos a llevar las riendas de nuestra vida con autocompasión y misericordia.
Comentarios
Publicar un comentario
Que el Señor te conceda su paz.